Pese a que primera vista, podemos pensar que las puertas cuentan con un mecanismo muy sencillo, hay elementos como los burletes que son necesarios para asegurar el correcto funcionamiento de las mimas, para evitar por ejemplo, roces. Otro elemento al que debemos prestar atención es al cierrapuertas, de vital importancia a la hora de abrir y cerrar la puerta.
¿Qué es un cierrapuertas?
Cuando hablamos del cierrapuertas, nos referimos a un mecanismo mecanizado instalado en las puertas, de modo que se realice un movimiento controlado, a la hora de abrir y cerrar. Del buen funcionamiento de estos, depende el correcto aislamiento térmico, para no desperdiciar, por ejemplo, el calor de la calefacción.
Un mecanismo cierra puertas está compuesto por los siguientes elementos:
- Brazo articulado: Es la parte visible que permite que el cierre automático de la puerta tenga un ángulo de apertura y cierre. Complementa la función de las bisagras.
- Barra deslizante: Se coloca en puertas de exterior fabricadas en materiales ligeros. Forma parte de los mecanismos más sencillos, incorporando un muelle para puertas que facilite el cierre.
- Retenedor: Los sistemas de cierre más modernos incorporan retenedores, para asegurar la apertura controlada sin golpes bruscos. En los cierres hidráulicos no se colocan.
- Válvulas de control: Controlan la velocidad de cierre y el golpe final, desacelerando el movimiento para hacerlo de forma progresiva.
- Mecanismo piñón cremallera: Une el brazo articulado con la parte fija de la puerta, siendo el nexo de unión. De su función depende el recorrido de cierre y apertura.
- Revestimiento: Como su propio nombre indica, sirve para revestir el mecanismo de piñón cremallera junto al brazo articulado.
Tipos de cierrapuertas
Igual que podemos encontrar puertas de forja, aluminio o madera, también existen diferentes tipos de cierre de puertas. Los más habituales, son los siguientes:
- Brazo articulado: Son los mecanismos de cierre más habituales, ya que sirven también para las puertas pesadas. Se pueden complementar con un retenedor, para mantener fija la puerta en el punto que nosotros deseemos.
- Aéreos: Se instalan en tiendas, comercios y locales comerciales.
- Ocultos: Pensados para puertas de madera, manteniéndose ocultos en el marco de la misma.
- Guía deslizante: En vez de tener un brazo hidráulico, funcionan con una guía deslizante, ocupando menos espacio. Es el más instalado en modelos de puertas pequeñas.
- De suelo: Es el cierrapuertas exterior utilizado como mecanismo de cierre en puertas de aluminio y cristal, ya que permiten regular la apertura y el cierre. Podemos encontrar este tipo de cierra puertas en colegios, museos u oficinas.
Mecanismo de cierre de puerta: Elegir el mejor
Si en nuestra comunidad de vecinos necesitamos una puerta cuyo sistema de cierre nos permite entrar sin dificultad, una de las mejores opciones será instalar una puerta automática. Con este modelo, no tendremos que preocuparnos por cambiar el cierrapuertas ya que contaremos con un mecanismo que nos permite accionar la apertura a distancia desde el exterior y mediante un interruptor en el interior. Además, cuentan con parada y cierre automáticos, por lo que facilita la entrada.
Por otra parte, si la puerta de nuestro portal está siempre abierta, debemos valorar el cambio para aumentar la seguridad de los vecinos, evitando robos o la entrada de okupas.
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